Nació el 8 de febrero de 1834 en Tobolsk - Rusia y falleció el 2 de febrero de 1907 en San Petersburgo - Rusia.
El científico Dimitri Mendeleiev es el descubridor de la tabla periódica de los elementos. Dimitri pasó a la posteridad por esta importantísima aportación a la química.
La capacidad de trabajo del científico era legendaria y su dedicación a la ciencia absoluta.
Llegaba a pasar semanas enteras sin abandonar su laboratorio, fiel a su máxima de que el trabajo es la mejor garantía del éxito en cualquier empresa.
Pese a sus esfuerzos, fue un sueño el que lo hizo inmortal en la historia de la ciencia.
Mendelev llevaba meses trabajando en su gran obra: "Química Orgánica" y una noche se quedó dormido en su laboratorio, algo que le pasaba habitualmente. Pero aquella noche soñó con una estructura de tabla con columnas e hileras y se vio a si mismo más eufórico que nunca.
Cuando despertó de aquel sueño estaba tan impresionado, que escribió en un papel todo.
Aquel sueño le permitió clarificar los miles de datos que tenía almacenados en su cerebro y que eran fruto de su exhaustivo trabajo, ordenando los elementos químicos conocidos y llegando a predecir su peso atómico y las propiedades físicas y químicas de otros elementos desconocidos de la época, a los que reservo un espacio vacío en su famosa tabla.
La capacidad de trabajo del científico era legendaria y su dedicación a la ciencia absoluta.
Llegaba a pasar semanas enteras sin abandonar su laboratorio, fiel a su máxima de que el trabajo es la mejor garantía del éxito en cualquier empresa.
Pese a sus esfuerzos, fue un sueño el que lo hizo inmortal en la historia de la ciencia.
Mendelev llevaba meses trabajando en su gran obra: "Química Orgánica" y una noche se quedó dormido en su laboratorio, algo que le pasaba habitualmente. Pero aquella noche soñó con una estructura de tabla con columnas e hileras y se vio a si mismo más eufórico que nunca.
Cuando despertó de aquel sueño estaba tan impresionado, que escribió en un papel todo.
Aquel sueño le permitió clarificar los miles de datos que tenía almacenados en su cerebro y que eran fruto de su exhaustivo trabajo, ordenando los elementos químicos conocidos y llegando a predecir su peso atómico y las propiedades físicas y químicas de otros elementos desconocidos de la época, a los que reservo un espacio vacío en su famosa tabla.
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