Mario y Marcos, dos niños madrileños de ocho y nueve años, se encontraron el domingo pasado un sello papal del siglo XVI en el jardín de la casa de su abuela.
El sello pertenece al Papa Sixto V (1585-1590).
"Los niños estaban jugando en el jardín de la casa de mi madre, cuando se encontraron con lo que creyeron que era una piedra redonda", decía la madre de Marcos, Elena Pérez.
"Mi sobrino le dio una patada, pero mi hijo Marcos la recogió, la limpió de arena y corriendo vino a enseñármela, porque él ya estaba convencido de que era una antigüedad".
Elena se dio cuenta de que podía ser un objeto importante, lo fotografió y envió la foto por e-mal al Vaticano para que pudieran verlo.
Marco Grilli, secretario de la Prefectura, le confirmó que era un sello del Papa Sixto V, explicándole también, que las letras que aparecían en cada cara del sello correspondían a San Pablo y a San Pedro (SPA y SPE).
Al parecer, el sello pudo utilizarse para sellar alguna bula papal de Sixto V, que es un documento sobre asuntos políticos o religiosos.
Bula procede del latín "bulla" y se refiere a la medalla redonda que portaban en el cuello los hijos de algunas familias pudientes o nobles romanas. Cuando se hacían mayores, se les imponía la toga y se les quitaba el sello.
Durante la Edad Media, este término comenzó a utilizarse para denominar los sellos de plomo y otros materiales que llevaran estampadas signos o figuras y que servían para proteger los documentos de los papas.
0 comentarios:
Publicar un comentario